Ixifi 100 mg, cuyo principio activo es infliximab, se prescribe para tratar varias enfermedades inflamatorias crónicas, incluyendo la artritis reumatoide, la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa, la espondilitis anquilosante, la artritis psoriásica y la psoriasis en placas.

Ixifi se administra mediante infusión intravenosa. La infusión debe ser realizada en un entorno médico por profesionales de la salud capacitados. El medicamento generalmente se administra con un esquema inicial, seguido por dosis de mantenimiento cada 6-8 semanas, dependiendo de la enfermedad específica que se esté tratando y la respuesta del paciente.

Antes de comenzar el tratamiento con Ixifi, es importante realizar pruebas para descartar tuberculosis activa u otras infecciones, ya que infliximab puede aumentar el riesgo de infecciones. Los pacientes deben informar a su médico sobre cualquier condición médica preexistente, especialmente si tienen problemas cardíacos o hepáticos, o si han tenido cáncer. No se debe administrar vacunas vivas durante el tratamiento con Ixifi.

Los efectos secundarios de Ixifi pueden incluir reacciones en el sitio de la infusión, como dolor, enrojecimiento o hinchazón, así como síntomas gripales, dolores de cabeza y náuseas. Los efectos secundarios más graves incluyen infecciones, reacciones alérgicas severas, y posibles problemas hepáticos y cardíacos. Se deben monitorear a los pacientes para detectar signos de infección y otros efectos adversos.