Caprelsa se prescribe para el tratamiento del carcinoma medular de tiroides (CMT) avanzado en pacientes con enfermedad progresiva y que no son candidatos para cirugía. El CMT es un tipo raro de cáncer de tiroides que puede ser más difícil de tratar que otros tipos de cáncer de tiroides.

Caprelsa se administra por vía oral, en forma de tabletas. La dosis recomendada es de 300 mg una vez al día, tomada con o sin comida. Es importante tragar la tableta entera, sin romperla, masticarla ni triturarla. La administración debe realizarse aproximadamente a la misma hora cada día para mantener una concentración constante del medicamento en el cuerpo.

Antes de empezar el tratamiento con Caprelsa, es crucial informar al médico sobre cualquier condición médica preexistente, especialmente problemas cardíacos, hipertensión, problemas de tiroides, o si se tiene un historial de prolongación del intervalo QT. Durante el tratamiento, se requerirá un monitoreo regular del electrocardiograma (ECG) y de los niveles de electrolitos para prevenir problemas cardíacos. También es importante evitar el consumo de pomelo y jugo de pomelo.

Los efectos secundarios de Caprelsa pueden incluir diarrea, rash, náuseas, hipertensión, dolor de cabeza, fatiga, y cambios en el electrocardiograma (como prolongación del intervalo QT). Efectos secundarios más graves pueden incluir problemas cardíacos, sangrado, problemas respiratorios, y reacciones cutáneas severas. Es fundamental informar inmediatamente al médico si se experimentan síntomas como dolor en el pecho, dificultad para respirar, sangrado anormal, o erupciones cutáneas graves.